La educación patriótica, el espíritu cívico han formado parte de los aprendizajes escolares durante la mayor parte del siglo XX, aunque no siempre de la misma manera y con la misma intensidad. Destriana no fue una excepción.

El tema de la Patria más que ser el único protagonista del libro educativo, aunque en algún caso podía ser así, en la mayoría de los casos informaba el resto de las materias, podemos en terminología actual, considerarlo como un tema trasversal.

Este carácter alcanza su máxima expresión en los textos escolares de la dictadura del general Franco, cuyas lecturas y ejemplos tenían claras connotaciones patrióticas. El modo de servir a la patria en ese momento era aprender a amarla junto a las tablas de multiplicar y dividir.

Ejemplo de los dicho podemos considerar el libro de JOSÉ DALMÁU CARLES, ESPAÑA, MI PATRIA. Dice el prólogo que "en él hallareis, en síntesis concisa, el valor inapreciable de la riqueza hispana; en él conocereis nuestras glorias más legítimas; .......... él, en fin, os trazará el camino que debéis seguir, para trabajar con fe por vuestro honor y por el engradecimiento de la Patria".